Entró en vigencia norma que regula emisión de olores en planteles porcinos

Lunes 6 de febrero de 2023.- Casi 13 meses demoró la Contraloría en visar la norma de emisión olores en el sector porcino, la primera en su tipo en nuestro país, que fue aprobada por el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad el 17 de enero de 2022. Pero no hay plazo que no se cumpla y hoy fue publicada en el Diario Oficial, lo que marca su entrada en vigencia.

Esta normativa rige para todos los criaderos de cerdos emplazados en el territorio nacional que tengan sobre 750 animales, para los cuales se establecen límites de emisiones de olores, así como la necesidad de implementar mejoras tecnológicas y buenas prácticas operacionales para su control. Por ejemplo, aquellos planteles porcinos que aún posean lagunas de purines sin tratar deberán aplicar tecnologías para reducir las emisiones odorantes que allí se generan. Además, exige reportar las prácticas operacionales que ayudarán a disminuir los eventos de olor y mejorar la comunicación entre autoridades, establecimientos regulados y comunidad.

La regulación se desarrolló en el marco de la Estrategia para la Gestión de Olores que se puso en marcha en el año 2012, y cuenta con robustas técnicas de medición, con estándares similares a los de Holanda y está homologada por el Instituto Nacional de Normalización (INN).

La Superintendencia del Medio Ambiente velará por el cumplimiento de los estándares establecidos en la regulación, y coordinará un sistema de reportes que permita el autocontrol de las empresas y la disposición de información actualizada.

La norma completa se puede revisar en el siguiente link: https://bit.ly/3x0EP6N

Cabe destacar que el Ministerio del Medio Ambiente sigue avanzando en la elaboración de normas para controlar las emisiones de olores de otras actividades. De hecho, hoy también se publicó en el Diario Oficial el anteproyecto para el sector pesquero, cuya etapa de consulta pública comenzará el próximo lunes 13 de febrero. Detalles al respecto se pueden ver aquí.

Además, se trabaja en regulaciones para limitar las emisiones odorantes de la industria celulosa -cuya propuesta está en etapa de revisión-, de los rellenos sanitarios y de las plantas de tratamiento de aguas servidas.