Lunes 8 de mayo de 2023.- El principal objetivo de la gestión de las estaciones de depuración de aguas residuales (EDAR) o plantas de tratamiento de aguas servidas (PTAS) reside en alcanzar los estándares exigidos de calidad del agua depurada al menor costo operativo posible y con el menor impacto ambiental. Este reto se pone especialmente de relieve en un contexto en el que los operadores de estas instalaciones deben ser capaces de procesar y traducir en acciones reales la inmensa cantidad de datos procedentes de fuentes múltiples y heterogéneas.
Ante esta situación, la implantación de Sistemas de Gestión de la Información (SGI) en las PTAS es la solución más indicada para captar, homogeneizar y unificar estos datos de forma estandarizada. De esta manera, se establece una única fuente de datos vinculados entre sí con el fin de liberar todo el potencial de la información realmente disponible. Así lo indica la empresa internacional Idrica en un reciente informe titulado "Digitalización de las EDAR: claves para un futuro más sostenible".
Estos SGI adquieren más importancia si cabe en un contexto en el que las PTAS continúan su imparable camino hacia la digitalización mediante la introducción de nuevas tecnologías que permiten a los gestores tener un conocimiento más preciso de sus procesos de tratamiento: LIMS, GMAO y SCADA se ven complementados por sensores de última generación. En concreto, la adquisición de datos en tiempo real proporcionada por la creciente aparición de instrumentación sofisticada está transformando la manera de operar estas infraestructuras hacia una toma de decisiones más rápida e informada.
Integración en un entorno único
Resulta, por tanto, imprescindible que nuevas plataformas habiliten el siguiente paso en el camino de la digitalización: la integración de todas estas fuentes de datos en un entorno único. Este es un paso fundamental. Para Jacobo Illueca, Wastewater Specialist de Idrica, "permite al operador de la EDAR controlar de manera integral todos sus procesos a través de: dashboarding, sistemas de alertas, controles de calidad del dato y cálculo en tiempo real de KPIs operativos para el seguimiento del cumplimiento de los objetivos estratégicos de la operación tanto en términos de calidad como económicos". Además, contar con un lugar único en el que convivan todos los datos de la planta depuradora, independientemente de su tipología y fuente, "es algo imprescindible para dar los siguientes pasos de forma ágil y con resultados robustos", apunta el experto.
En un nivel más avanzado de la digitalización, estos datos son utilizados para crear, entrenar y alimentar: modelos predictivos, simulaciones, algoritmos de detección de anomalías y sistemas de soporte a la toma de decisiones. Todos estos con el objetivo de mejorar la operación de la planta en términos de calidad, costos, impacto ambiental y transparencia.
En este sentido, para garantizar una óptima digitalización de las PTAS, Idrica recomienda en su informe la ejecución de dos pasos previos: la consultoría previa de la depuradora y la implementación de sistemas de gestión del dato.
En el primer paso, mediante la consultoría previa se efectúa un diagnóstico digital de la planta analizando su punto de partida y estableciendo en consonancia con el operador objetivos específicos y adaptados a la realidad de la instalación. Como resultado, se obtiene un plan de acción personalizado para alcanzar esos objetivos.
En segundo lugar, la implementación de sistemas de gestión del dato permite la integración de todos los datos de la PTAS, homogeneizándolos con inteligencia avanzada y mostrando la información más relevante del sistema al usuario a través de un único cuadro de mando holístico. Gracias a este sistema, "el gestor monitoriza toda su explotación desde una única interfaz. Además, este tipo de sistema permite al usuario crear reglas de toda tipología para automatizar los procesos de la depuradora, creando alarmas de cada proceso", tal y como indica Illueca.
Ocho características
No toda tecnología es válida para la transformación digital de las PTAS, sino que debe reunir una serie de características con el fin de capacitar a los gestores para desarrollar los principales casos de uso mencionados a continuación. Según el informe elaborado por Idrica, la tecnología debe ser:
• Adaptable, que permita la integración con múltiples sistemas de autentificación de usuario (auth/login) y considere diferentes repositorios de datos.
• Flexible, que consiga personalizaciones estándar y comportamientos específicos según los procesos de negocio establecidos.
• Escalable, capaz dar respuesta a medida que aumenta el número de usuarios.
• Multientorno, que sean posibles los despliegues on-premise, los despliegues en la nube privada y los basados en la nube (servicios).
• Competitiva, capaz de operar con tecnologías de terceros y licencias asequibles, con una baja huella de hardware para empezar y alta disponibilidad si se requiere. Fácil de desplegar, con pipelines automatizados, y disponible tanto on-premise (en las instalaciones) como en la nube, con procesos fiables de roll-back.
• Fácil de mantener, que tenga un registro eficiente que permita la monitorización remota y centralizada.
• De sencilla implementación, es decir, que cuente con APIs ricas y bien documentadas, sin acceso directo a la base de datos y lógica de negocio para evitar daños en el sistema.
La digitalización de la PTAS es, por lo tanto, un proceso clave que debe ser llevado a cabo para minimizar los costos toda vez que se logra aumentar tanto su productividad como su eficiencia. Máxime, en un momento como el actual, con el aumento de la población y el cambio climático como actores protagonistas en el ámbito de la gestión hídrica.